La advertencia de la aplicación de medidas arancelarias y no arancelarias a Estados Unidos no fue cumplida el pasado domingo por la presidenta Claudia Sheinbaum. Por el contrario, anunció Entre Líneas que México no impondría aranceles a partir del 2 de abril porque recordó que somos socios de EU en el TEMEC y confió en que los vecinos del Norte no los apliquen finalmente.
El domingo, en la asamblea informativa que dio en el Zócalo capitalino, la presidenta Sheinbaum adelantó tácitamente que México no aplicará ningún arancel a EU, luego de manifestar su confianza en que Estados Unidos no aplicará tarifas recíprocas a México. “Somos optimistas”, subrayó, porque el gobierno de EU ha anunciado que el 2 de abril “pondrá aranceles recíprocos a todos los países del mundo, si algún país le cobra por sus exportaciones, Estados Unidos lo hará también”.
Y remarcó: “Nada más que México no está en ese ámbito, pues desde hace 30 años hemos firmado dos tratados comerciales con los que se establece que no tenemos aranceles con ellos, ni ellos con nosotros; es decir, no se tendrían que aplicar tarifas recíprocas, porque prácticamente no las hay de México hacia Estados Unidos”.
Tal interpretación de la presidenta de México sería confirmada por el propio presidente de EU, al reiterar que sus planes para gravámenes “recíprocos” más amplios entrarán en vigor el 2 de abril para igualar lo que otros países aplican. “El 2 de abril todo será recíproco; lo que ellos nos cobran, nosotros les cobramos a ellos”, precisó.
Si el presidente de EU anuncia ese día que no aplicará aranceles a México, la presidenta de México estaría ganando esta partida. Pero a cambio de eso, el gobierno de Claudia Sheinbaum tendrá que seguir haciendo lo que no hizo el gobierno de López Obrador: mantener las acciones contra la producción y tráfico del fentanilo, así como el combate a los grupos de la delincuencia organizada.
De cualquier manera, la presidenta Sheinbaum ha actuado con inteligencia, con cabeza fría, frente a un presidente de EU estridente que seguramente continuará con sus advertencias hacia otros países, incluyendo al nuestro, con tal de quedar bien con importantes y poderosos sectores de su país, lo que requiere actuar como hasta ahora lo ha hecho la presidenta de México para proteger a los nuestros.
EL hecho de que el pasado fin de semana haya venido personalmente el director general del IMSS-Bienestar al estado para supervisar junto con la gobernadora Indira Vizcaíno Silva la operación y el funcionamiento del Hospital Regional Universitario es una buena señal de que se resolverían las deficiencias que hay en este hospital, debido a la falta de medicamentos, insumos y de personal, una vez que la propia mandataria comprobara que estas necesidades son auténticas, no inventadas por los propios trabajadores del HRU o del Sindicato. El pueblo ha aguantado y ha pagado mucho por la falta de un buen servicio de salud y es justo que ya se otorgue la buena atención médica que le han prometido, para que dejen de gastar en la atención privada lo que reciben por el aumento al salario mínimo, por más becas, por más pensiones y por más apoyos sociales.
LA pasada manifestación por el 8M hizo recordar que el gobierno le debe mucho a las mujeres, agraviadas principalmente por la violencia que se ejerce contra ellas, como golpes, abusos, violaciones y hasta asesinatos. Las cifras ahí están y reflejan la realidad que se quiere esconder. Por eso, tal vez, la gobernadora reconoció que “tenemos mucho trabajo por hacer en la defensa de las causas de las mujeres”. Y tratándose de una mujer, se espera que en el gobierno de Indira Vizcaíno se trabaje más, se actúe más, pues las mujeres necesitan ya del apoyo y de la protección del gobierno para frenar, disminuir y terminar en el corto plazo la violencia que ejercen muchos hombres hacia ellas y que al fin se les haga justicia. Las mujeres no deben seguir siendo agraviadas u ofendidas cuando reconocemos que son los pilares en la familia y en la sociedad.