*Fue un huracán categoría cinco que se registró un 27 de octubre de 1959, dejó cientos de muertos y cuantiosos daños materiales
Se cumplen ya 64 años del ciclón que devastó a los municipios de Minatitlán y Manzanillo, fue un huracán de categoría cinco que se registró un 27 de octubre de 1959, dejó cientos de muertos y bastantes daños materiales, así como secuelas que aún se recuerdan con tristeza por la pérdida de muchas personas, niños, jóvenes, adultos y adultos mayores.
El meteoro se metió tierra adentro, hacia la población de Minatitlán en donde descargo su agua, lo que ocasionó voluminosos deslaves de los cerros circunvecinos, sepultando a casi la mitad de la población, concretamente del cerro de Los Copales.
En Manzanillo se hundieron embarcaciones que se encontraban fondeadas y otras que se refugiaron en la bahía. No todos resistieron los vientos del ciclón como “El Corzo”, “El Santo Tomás”, “El Xalapa” y “El Sinaloa”, que ante los fuertes vientos y oleaje se hundió frente a las costas colimenses: 12 personas lograron salvarse.
La cantidad de agua dejada por el meteoro produjo que los ríos crecieran, rebasaran los cauces y en consecuencia inundaran las casas cercanas, arrastrando a personas y animales que murieron ahogados.
En Minatitlán el flujo de escombros arrastró a hombres, mujeres y niños al río Minatitlán que también es nombrado Chacala, Paticajo y Marabasco en la desembocadura de Cihuatlán.
Los cuerpos encontrados entre el fango fueron sacados y enterrados en fosas comunes que cavaron las cuadrillas minatitlenses, organizadas por el entonces alcalde Juan Michel Figueroa, el sacerdote Teodoro Guerrero Gallardo y el profesor Héctor Mancilla Figueroa. Evidentemente, ellos fungieron como representantes de los pilares morales de la comunidad: las leyes, la fe y la educación, en un momento en que el dolor por la muerte era compartido el entierro perdía parte de su ritualidad.
En una entrevista, el ingeniero Francisco Javier Mancilla Aguilar afirmó que en el pueblo de Minatitlán fallecieron 205 personas. Por su parte el profesor Héctor Manuel Mancilla Figueroa publicó que hubo entre 296 y 312 muertos. El periodista Ismael Aguayo Figueroa en su libro llamado “Ciclón” señaló 350 personas fallecidas y el profesor Manuel Velasco Murguía dijo: “Fueron varios cientos”. Las cifras evidentemente están en desacuerdo y son imprecisas.
La lluvia no calmaba ni de día ni de noche, para el día 26 de octubre, la estación meteorológica comenzó a mandar boletines de tiempo por las estaciones radiofónicas XECS y XEAL, informando a la población sobre el mal tiempo y el ciclón que se formaba frente a las costas de Manzanillo, hacia el sur, la gente atemorizada, esperaba de un momento a otro la llegada del meteoro el cual desafortunadamente, llegó el 27 de octubre y devastó los municipios de Manzanillo y Minatitlán, con saldo de cientos y cientos de muertos y bastantes daños materiales.
Cabe señalar que el boticario Francisco Ventura es y seguirá siendo recordado por todo el pueblo minatitlense, ya que puso a su disposición todo el medicamento que en aquel entonces tenía en su botica, así como su atención médica a los sobrevivientes de este fatal suceso.
Sin duda, realizó una excelente labor altruista en beneficio de los minatitlenses que sobrevivieron, no escatimó esfuerzos ni recursos para dotar de medicamentos y servicio médico a los hombres, mujeres, niños, jóvenes y adultos mayores que requerían de su ayuda.
Es de mencionar que, los datos para la realización de este Reportaje Especial sobre el ciclón del 27 de Octubre de 1959, fueron proporcionados por los profesores Tomás Naranjo y Héctor Manuel Mancilla Figueroa, así como también en su momento por la Señora Andrea Figueroa Rodríguez (+) a quienes agradecemos infinitamente por su importante y valiosa aportación.