*Tipificar el delito del matrimonio infantil y la cohabitación forzada es un gran paso hacia una vida libre de violencia para la niñez mexicana
La diputada federal Julia Jiménez informó sobre la entrada en vigor del matrimonio y la cohabitación forzada infantil en el Código Penal Federal como delito, “Se publicó en el DOF el decreto por el que se reforma el artículo 205-Bis y se adiciona un Capítulo IX al Título Octavo del Código Penal Federal, relativo a la unión formal o informal forzada de menores de 18 años, lo que consideramos un gran avance en el respeto de los derechos humanos de nuestras infancias”.
Julia Jiménez expresó que las niñas y los niños en nuestro país son las personas más vulnerables y más vulneradas, “lamentablemente son víctimas de los delitos más graves, y las cifras sobre matrimonios infantiles en nuestro país son desgarradoras, pues de acuerdo al Inegi, cada día se realizan 38 uniones forzadas en el país, y en el 2021, de las 10.9 millones de mujeres menores que contrajeron matrimonio, alrededor de 7,9 millones tuvieron su primer hijo antes de los 18 años”.
“Asimismo, 326.000 mujeres mexicanas fueron robadas en contra de su voluntad para casarse, mientras que 193.000 se casaron a cambio de dinero, propiedades o regalos a sus padres para que celebraran matrimonios arreglados, según datos del Inegi”, apuntó la legisladora federal.
Con esta reforma al Código Penal Federal se podrá castigar con 8 y hasta 22 años de prisión a quien obligue, coaccione, socialice, gestione u oferte una o varias personas menores a unirse de manera informal o formalmente en matrimonio con o sin su consentimiento.
Además, se impondrán de mil a 2 mil 500 días de multa. La diputada federal Julia Jiménez expresó que esta es la forma en que podemos combatir las uniones formales e informales, “ahora ya no habrá excusa para sancionar los matrimonios infantiles, que caiga todo el peso de la ley a quien obligue a casarse a nuestras niñas y niños, pues estamos protegiendo a lo más valioso que es nuestra niñez”, dijo.
Finalmente, Julia Jiménez señaló que el matrimonio forzado no sólo violenta el presente de las niñas y adolescentes, sino también limita las posibilidades de crecimiento y desarrollo hacia el futuro, “seguiremos trabajando desde la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión para fomentar la educación, hacer frente a la trata y el secuestro de menores, entre otras estrategias que, sumadas a la sanción del matrimonio infantil, puedan prometer un mejor futuro para nuestras infancias mexicanas”.