Ante la imparable ola de violencia que se vive en todo el país, los Obispos de México a través del Episcopado Mexicano se organizaron para iniciar una campaña nacional de concientización católica para trabajar en forma conjunta entre las iglesias y las organizaciones de católicos en favor de la paz y la tranquilidad social, hacen un llamado respetuoso a las autoridades de los tres niveles de gobierno para que se reorganicen, y piden hacer oración a Dios por las víctimas que han fallecido y los victimarios que se encuentran en el camino del mal para que tengan su conversión.

Mediante un comunicado, los Obispos de México señalan: “reconocemos que como iglesia no hemos hecho lo suficiente en la evangelización de los pueblos y que es necesario redoblar esfuerzos. Queda mucho por hacer en la reconstrucción del tejido social, desde la labor pastoral que nos es propia. Reafirmamos nuestro compromiso manifestado en nuestro primer eje transversal del proyecto pastoral 2021-2024: La construcción de paz. Por tanto, hacemos un llamado a todo el pueblo de Dios, en especial a los sacerdotes, religiosos (as), catequistas, evangelizadores y demás agentes de pastoral, a sumarse en los trabajos por concretar el proyecto de paz de Cristo”.

EN ESPÍRITU SANTO SEÑALAN QUE MÉXICO ESTÁ HERIDO En la prestigiada parroquia del Espíritu Santo ubicada en la capital de Colima, el presbítero José Félix Flores Velasco hizo una excelente homilía o sermón sobre la violencia en el país y la necesidad de buscar nuevas alternativas de recomposición social, empezó señalando de que México estaba herido, casi rendido en el suelo por tantas muertes en el territorio nacional, que la alta criminalidad llegó también a las iglesias y a los sacerdotes, no respeta la vida ni de niños, niñas ni ancianos o adolescentes, por tal motivo los Obispos y los Sacerdotes ya no pueden mantenerse callados, solamente observando la alta inseguridad pública, nuestra comunidad católica debe coadyuvar para encontrar un mejor rumbo para lograr la paz y la tranquilidad de las familias, precisó.

Frente al altar en Espíritu Santo colocaron una cruz tapizada de imágenes de sacerdotes asesinados en los últimos años, se pidió orar por las víctimas asesinadas, y acudir a una misa el viernes 27 de julio a las 7 pm en un lugar donde han ocurrido varios hechos violentos, se invitó a orar todos los jueves del mes de julio a las 6 pm para que cese la violencia, se informó que el día domingo 31 julio todas las misas serán para orar por los victimarios o personas que están haciendo daño y están dañadas por el mal, implorando a Dios para que tengan su conversión y se integren a sus familias. También representantes de los grupos religiosos convocaron a las asociaciones civiles y a los medios informativos a unirse con la comunidad católica para que en forma conjunta se recomponga el tejido social y así recuperar la tranquilidad y la paz. Se sabe que en todas las iglesias del estado y del país hicieron algo similar.

PANORAMA EN LAS IGLESIAS Tan solo el año pasado hubo cerca de 2 mil robos a iglesias, casi 800 extorsiones y 287 cobros de piso, 175 amenazas de muerte a clérigos, además de los asesinatos de sacerdotes. La cruda realidad es que ni el gobierno federal anterior ni el actual con Morena han podido frenar la violencia nacional y en los estados, inclusive según las actuales cifras oficiales de incidencia delictiva estamos peor que antes, porque la criminalidad y los delitos se han disparado, por ello va en también aumento el clamor público, hasta llegar ahora con – el reclamo de la iglesia por la violencia que será histórico-, por ello hoy la comunidad católica y la sociedad mexicana le aplaude a esta nueva postura iniciada ayer domingo en todas las iglesias del país, porque también han sido violentadas.

Si recordamos el asesinato reciente de dos sacerdotes Jesuitas en la sierra Tarahumara de Chihuahua conmocionó al país y llamó la atención al propio Papa Francisco quien condenó las ejecuciones y a la violencia que vive México, pues el malestar social se ha acumulado durante años, se pensó que se mejoraría al cambio de gobierno de la 4T, por tal motivo por ello “el gobierno de Morena se enfrenta al reclamo de una de las instituciones más poderosas del país, la Iglesia Católica Romana, y ampliará la protesta pública y su clamor nacional, precisamente cuando se inicia la sucesión presidencial del 2024, y todo porque la estrategia de la seguridad pública -simplemente no ha funcionado-. ¿No será más fácil reorganizar la seguridad pública? o ¿será mejor no dar el brazo a torcer? Y solo decir que todo va bien.