Contrariamente a lo que la fanaticada López Obradorista quiere hacer creer, a las elecciones del domingo 1 de junio de 2024 su Partido Movimiento de Renegación Nacional “no irá a un día de campo” sino todo lo contrario, verdad de a kilo expresada recientemente por el zacatecano senador de la República, Ricardo Monreal Ávila, el mal querido de los aspirantes morenos a candidatos a suceder en el caro al líder moral de la Cuarta Transformación que sólo ve por los ojos de su corcholata Claudia Sheimbaum Pardo.
Monreal Ávila podrá tener ya, como afirma, elaborado su proyecto de nación que le presentaría como candidato presidencial al pueblo bueno y sabio de México, con propuestas claras y concretas en los importantes rubros de educación, salud, cambio climático, medioambiente, empleo, bienestar y seguridad pública, pero debe saber que la extrema morenista no le dará oportunidad de participar ni como pre-pre candidato, así jure y perjure que “ continuaría con la política social ( de AMLO) y haría un llamado al pueblo de México a la unidad, a la reconciliación, porque soy de los que piensa que podemos llegar al mismo puerto, con el concurso y el acompañamiento de todos los sectores, dialogando y platicando con todos”.
Nadie duda de que Don Ricardo tenga claridad en lo que quiere; tampoco, de que pueda representar el mejor proyecto de profundización de la vida democrática del país, mucho memos de que su experiencia acumulada durante más de 40 años en el servicio público sea “una garantía para un ejercicio pleno y eficaz en el gobierno”, pero si es pasión inscribirse al proceso interno “una vez que se lance la convocatoria”, más le vale que se le borre, pues lo único que logrará con seguir confiando en su amado líder moral a quien le jura y perjura lealtad hasta la ignominia, será quedar varado a la vera del camino que conduce a Palacio Nacional.
Ni el senador Monreal Ávila ni los pensadores libres de ataduras 4tepístas creen en las encuestas como método para la designación de candidatos porque “son fácilmente manipulables”, pero ni la celebración de elecciones primarias que él propone, con debates entre los aspirantes a presidentes de la República y votación organizados por el Instituto Nacional Electoral, le impedirán al dueño del negocio, Andrés Manuel López Obrador, imponer su santa voluntad.
Como RMA “nunca va a traicionar a ni partido ni al Presidente Andrés Manuel López Obrador, ya que ayudó a construir el movimiento de la Cuarta Transformación y aunque no esté de acuerdo en que se emplee el método de la encuesta, no va a salir de Morena, a luchar dentro de Morena”, morirá en la raya, así se sienta tranquilo y crea en la gente “porque yo construí Morena y aun cuando el Presidente tenga una opinión, yo la respeto, no me voy a enfrentar a él, sería un suicidio por la fuerza y por la autoridad moral que tiene”, ya estuvo que se lo llevó al baile sexenal la tía de las muchachas.
Monreal Ávila advierte que Morena “no irá a un día de campo en la elección presidencial de 2024 debido a que los partidos de oposición podrían organizarse y competir en bloque, por lo que es importante seleccionar al mejor candidato”, pero ese mejor candidato, para AMLO, no es él, así es que más le vale buscar otro camino antes de que el tabasqueño le dé con el portón morado en su nariz y lo deje pa’l arrastre.Otro que seguirá la misma mala suerte del Senador Ricardo Monreal Ávila si no brinca a tiempo las trancas moradas del corral 4tepista es el Canciller Marcelo Ebrard Casaubón. Al tiempo.

EL ACABO

*A su paso por el Instituto Electoral y el Tribunal Electoral, ambos del Estado de Colima, José Luís Puente Anguiano, como consejero del primero y magistrado del segundo, ha tenido un desempeño nada edificante con sus pares femeninas, sino todo lo contrario. Iracundo, misógino y conflictivo a más no poder, al sujeto de marras que ha llegado a esos cargos gracias a las palancas políticas panistas y priistas que presume a diestra y siniestra tener, una vez empoderado en esos organismos públicos, le aflora su verdadera personalidad.

*Pues bien, Puente Anguiano acaba de armar tremenda grilla al interior del TEE secundado por la también magistrada como él, María Elena Díaz Rivera, par de aretes que alborotaron al personal de apoyo so pretexto de la aplicación de las necesarias medidas de austeridad derivadas de la disminución del presupuesto 2022, como la contención de los salarios. “Yo concursé para ganar bien”, les dijo Puente Anguiano a sus colaboradores. “Yo no soy beneficencia pública para andar haciendo caridad”, lo secundó Díaz Rivera.

*Esta semana tronará el cohete en el TEE donde José Luís Puente Anguiano y María Elena Díaz Rivera quieren generar una vacante de magistratura para entregársela en bandeja de plata a la 4T y así congratularse con la gobernadora.