En medio de una profunda crisis interna y con el riesgo de perder su registro nacional, el Partido Acción Nacional (PAN) anunció este sábado el fin de su alianza electoral con el PRI, la renovación de su imagen institucional y una apertura total a candidaturas ciudadanas, como parte de un relanzamiento estratégico para recuperar su identidad y cercanía con el electorado.

Durante el evento encabezado por su dirigente nacional, Jorge Romero, se confirmó que el blanquiazul pondrá fin a la política de alianzas que, según sus propios análisis, ha provocado un retroceso tanto en resultados electorales como en la conexión con su base militante. El nuevo rumbo busca que los militantes vuelvan a tener voz en la selección de candidatos a cargos de elección popular.

Jorge Triana, vocero del partido, explicó que esta decisión responde a estudios internos que revelan un creciente distanciamiento entre el PAN y los ciudadanos, derivado de las coaliciones con otras fuerzas políticas. Aclaró que, aunque se cierra la puerta a alianzas nacionales, las dirigencias estatales podrán evaluar acuerdos locales, siempre con la aprobación del Consejo Político Nacional.

Como parte de esta transformación, el PAN también presentó un nuevo logotipo y anunció cambios en sus procesos de afiliación, con el objetivo de facilitar la incorporación de nuevos simpatizantes y fortalecer su padrón, actualmente en niveles críticos ante el Instituto Nacional Electoral (INE).

El partido, que recientemente cumplió 86 años, busca con estas medidas recuperar su esencia como fuerza política de oposición, abrirse a perfiles ciudadanos que compartan sus principios y garantizar procesos internos más democráticos y transparentes.

*Con información de El País.