Desde que a mediados de enero de 2023 llegó a Colima enviado por el ex priista dueño del Partido Movimiento Ciudadano, Dante Delgado Ranauro, como su delegado, Benjamín Alamillo González se ha conducido como un gran exponente de la vieja política de las trampas, las simulaciones, la demagogia y el trabajo sucio. Su gran logró ha sido la incorporación a las filas naranjas de la renegada priista alcaldesa con licencia de Colima, Margarita Moreno González, denunciada ante la Fiscalía General del Estado por el delito de falsificación de documentos cometido supuestamente al haber truqueado su renuncia al PRI.
Como a los juniors Fosfo-Fosfo, a Benjamín le gusta la vida fácil con cargo a los bolsillos del pueblo bueno, por eso se le hizo fácil asegurarse una curul en la próxima LXI Legislatura Estatal por la cómoda vía plurinominal, candidatura para lograr la cual falseó su residencia en Colima tramitando una constancia de cinco años en el municipio de Minatitlán que, al igual que la renuncia de Elia Margarita, no le funcionó ante el Tribunal Electoral del Estado.
Otras trampas de Alamillo González violentaron los derechos humanos de las aspirantes a candidatura de MC a la presidencia municipal de Colima, Magdalena Harayd Ureña Pérez y Gabriela Rodríguez Macías, contra quienes ejerció violencia política de género para sacarlas de la jugada y allanarle así el camino a la inmaculada señora Moreno González de Noriega García, delito por el que, hasta la fecha, no ha sido sancionado.
Además de fullero vividor de las prerrogativas que el Instituto Electoral del Estado puntualmente le entrega a MC Colima, Alamillo González es un dirigente partidista inepto como quedó demostrado con la entrega tardía e incompleta de la documentación ante el IEE de sus candidatos a la contienda electoral por concluir.
Los electores colimenses tienen claro ya que el Partido Movimiento Ciudadano en el estado es una farsa, puras mentiras, trampas y simulaciones, indigno de fiar, y sus dirigentes y candidatos siempre prestos a victimizarse cuando son cogidos en la maroma como lo fueron Elia Margarita Moreno González y Benjamín Alamillo González, y el ahora candidato de MORENA a diputado por el Primer Distrito Electoral Federal, Leoncio Alfonso Morán Sánchez.
Si tuviera un mínimo de dignidad y vergüenza, Benjamín Alamillo González debiera ya haber puesto pies en polvorosa hacia la ciudad México desde donde en mala hora para la democracia colimense llegó a estas tierras. Como carece de ellas, sus jefes tendrán que regresarlo a los corrales para que no siga cometiendo más burradas en Colima.
EL ACABO
*Presumen de lo que carecen. Los emecistas juran y perjuran que representan la nueva política, pero su historia los condena, son todo lo contrario. Llevan seis años al servicio del líder inmoral de la Transformación de Cuarta como esquiroles en las contiendas electorales. En la en curso que se encuentra en su recta final, su candidato presidencial, el tal Álvarez Máynez, es mera comparsa de la candidata de Morena, Claudia Sheinbaum Pardo. ¿O no?
