Por lo que el tiempo encoja y porque más vale madrugar que quedarse en cama hasta muy tarde, Sergio Fuentes lanzó este lunes su candidatura para dirigir el Sindicato de Trabajadores al Servicio del Gobierno del Estado (STSGE), durante una rueda de prensa en la que estuvo acompañado de un grupo de simpatizantes. El suplente del actual líder de la burocracia, el enanín de Martín Flores Castañeda, se anticipó en las fechas, pues la convocatoria se lanza en julio y la elección tiene lugar un mes después, es decir, en agosto, en una fecha en el que ese organismo llega al emblemático medio siglo de vida.
El lanzamiento al ruedo de Sergio Fuentes es sumamente intrigante para el común de la gente, pues casi todos lo identifican con Martín Flores, del que incluso es su suplente como secretario general del STSGE, además de haber estado al frente de una de las carteras sindicales más importantes. Sin embargo, resulta que el destape del aspirante a líder sindical no tiene la bendición del enanín, sino del indirato en pleno, por lo que está clara la maniobra: registrar varias planillas para enfrentar a la del oriundo de Coquimatlán, que buscará la reelección con todo el aparato del Gobierno del Estado en su contra.
En la columna Xpress´o de este lunes, publicada en el ya imprescindible portal PXPress, se adelantó que el candidato del oficialismo es el traidor Víctor Vázquez Cerda, que ya ha ocupado el cargo inmerecidamente, pero ya se demostró que son más los que traicionaron al gremio, al pasarse al bando del indirato, donde quieren un líder charro y un sindicato más blanco que la leche de vaca.
Y es que, si con una dirigencia aguerrida la #GobernadoraAltozano le quieren imponer a los burócratas unilateralmente un mísero 3 por ciento de aumento salarial, con un “líder” blandengue a modo ni siquiera eso obtendrían. Y eso es lo que serán Víctor Vázquez o Sergio Fuentes: títeres del gobernador de facto de Colima, Arnoldo Vizcaíno Rodriguez, quien cree que va por la revancha, después que los maestros de la Sección 39 del SNTE lo enviaron a inflar burros por el pivote por intentar inmiscuirse en la vida interna del sindicato a fin de vulnerarlo en su autonomía y democracia.
Bueno, al haber fracasado la primera vez no lo ha amedrantado ahora en su intentona de meterse hasta la cocina del STSGE, pues en esta ocasión cambió la estrategia con la que piensa sorprender al enanín de Martín Flores. La jugada está clara: este lunes sale a la palestra Sergio Fuentes para comenzar a hacer ruido en las redes sociales, pero es posible que más adelante lo haga también Víctor Vázquez. Una vez avanzada la campaña que se realizará en los centros de trabajo, es posible que uno de ellos decline por el otro, es decir, jugar con el cuento de “la unidad” en la que Sergio Fuentes declina a favor de Víctor Vázquez. Igual puede pasar que los dos lleguen hasta el final con la intención de dividir y fraccionar el voto, debilitar la posición del enanín de Martín Flores y, en un descuido, derrotarlo en toda la línea.
Lo que pase con Martín Flores es algo que al autor de esta columna de culto le tiene sin cuidado: lo que sí preocupa es que el indirato en pleno emplee todos los recursos puestos a su disposición para apoderarse de un sindicato que, hasta ahora, le ha resultado incómodo a los que detentan el poder en la entidad. No sólo se trata de salvar la autonomía del STSGE, sino de evitar que caiga en manos de los que demuestran su desprecio por la democracia, la libertad, el respeto a los derechos civiles y ciudadanos, etcétera, algo de lo que siempre se han jactado las lacras que se dicen de izquierda (y cuando aún no han obtenido el poder).
De Sergio Fuentes me extraña su actitud, pero no de Víctor Vázquez: es un traidor por los cuatro costados. Por eso, si una vez traicionó alegremente a Agustín Martell Valencia, junto con el enanín de Martín Flores, así como también lo hizo con Ana Cristina, de nuevo lo volverá a hacer, muerto de la risa, poniéndose a los pies del viejo “luchador social” que también cree que ya es hora que le haga justicia la revolución morenaca, al aspirar a convertirse en candidato de Morena y aliados al Senado de la República.
Obvio: atrás quedarán los tiempos en los que, impotente, nunca pudo ser gobernador ni senador. Por lo pronto, hay tiro en el STSGE: el enanín de Martín se enfrentará a toda la maquinaria del indirato, que en los traidores Víctor Vázquez y Sergio Fuentes tienen su cabeza de playa.
1Bibiano Moreno