Tranquiliza saber que los diputados de la Fracción Parlamentaria del Partido Movimiento de Regeneración Nacional en la LX Legislatura Estatal, según su pastor el priista Armando Reyna Magaña, no están apanicados con la ola de violencia que apenas hace poco más de un mes cegó la vida de su ex compañero Roberto Chapula De La Mora, sino que, al contrario, se sientan seguros, tranquilos, serenos, campantes como Don Sebas, sin sudar ni acongojarse, ante las ejecuciones a sangre fría y acciones de franco narco terrorismo que se desataron en Colima el 25 de enero de 2022 y que a la fecha llevan ya más de 400 muertes violentas.
El seráfico estado de ánimo del tecomense y su pandilla contrasta con la zozobra que a diario viven los colimenses a quienes no hay gobierno que los ampare y proteja de los embates de la delincuencia organizada que supera la capacidad de respuesta de la autoridad proclive a los balazos y a toda clase de consideraciones para los delincuentes que también son seres humanos.
Pero indigna saber que en un insensato afán de congratularse con su jefa Indira Vizcaíno Silva, el priista relevo de Viridiana Valencia Vargas vea la sangrienta tempestad y no se hinque; al contrario, en lugar de aceptar la realidad de la grave violencia imperante en el estado y hacer algo para contenerla, se va por la vía fácil de culpar a los medios de comunicación locales de que “exista una percepción de inseguridad entre la población porque ellos magnifican la información y los hechos”, supuesta “magnificación ” que, por lo que él declara, a los diputados locales de la 4T que pastorea no les quita el sueño.
Seguramente en “aras de la gobernabilidad” que tanto invoca en sintonía con su patrón Leoncio Alfonso Morán Sánchez, el diputado naranja/morado Ignacio Vizcaíno Ramírez, temerariamente, como lo hizo su pastor Reyna Magaña, denunció que los medios de comunicación colimeños desinforman sobre la inseguridad que priva en el estado, pidiéndole al pueblo bueno y crédulo que sólo escuche la palabra del Vocero de la Mesa de Seguridad, Adrián Joya Cervera.
“Nos quieren tapar el sol con un dedo. Es muy lamentable que a escasos días de que celebremos el día de la Libertad de Expresión, algunos dizque “Representantes Populares” arremetan contra los medios de comunicación al querer culparlos de la percepción social de la violencia con la que se vive en nuestro estado, con el perverso objetivo de solapar la incapacidad de este Gobierno por cumplir su mandato de ley de brindarles seguridad pública a las y los colimenses”, le disparó directo entre ceja, geta y oreja, el diputado local prisita Héctor Magaña Lara a su hasta hace poco más de un año compañero de partido Armando Reyna Magaña, vocero de los diputados morenos que ni se inmutan.
Como son apóstoles de la misma 4T, Armando le cree a ciegas al vocero de la Coordinación de la Paz y la Seguridad en el estado de Colima, Adrián Joya Cervera, su cuento chino de que “los indicies de delitos y violencia han vendido a la baja”. Carente de inteligencia, imaginación y argumentos válidos, el priisita converso al morenismo, por así acomodarle a sus intereses, se olvida de que formó parte del gobierno peraltista cuando refiere que “Colima, durante muchos años, principalmente en la anterior administración estatal, ocupaba los primeros lugares en los índices de violencia e inseguridad; sin embargo, estos van a la baja y existe confianza en que esta situación habrá de mejorar en breve”. Habría que decirle al diputado prófugo del PRI, empeñado en ser alcalde de Tecomán 2024/2027, que golpeando a los medios de comunicación no llegará lejos.
Los diputados morenos no entienden que, como apunta Magaña Lara, “la paz que quiere Colima no se construye tapando el sol con un dedo sino reconociendo primero el problema para que juntos, sociedad y gobierno, encuentren las soluciones”. A Héctor se le agradece la reiteración de su respaldo, reconocimiento y solidaridad con el gremio periodístico y comunicacional del estado.
SE DICE QUE…
“Hemos levantado la voz en Tribuna y desde la propia curul en varias ocasiones sobre el tema de la libertad de expresión, que es un derecho que se debe salvaguardar por todas las instituciones y respetarse también por quienes tienen un cargo público (como los diputados Reyna Magaña y Vizcaíno Ramírez, por ejemplo); por su puesto, es fundamental que desde la Cámara de Diputados se garantice este derecho inalienable de cualquier persona.